Colectivistas vs individualistas, ¿Cómo nos afecta esta dualidad? Pensemos en algo: ¿Cuántas veces nos encontramos con comentarios como, “no entiende porque no es de aquí”, o “es que ellos son diferentes y no se quieren adaptar a nosotros”, también he escuchado… “si vienen aquí tienen que tomar nuestras costumbres y aceptarlas”, “si vienen entonces que se les vea el pelo, aquí eso no se hace”? A nivel personal me he encontrado pensando, ¿Cómo es posible que una mujer se deje hacer y deshacer a merced de la voluntad de un esposo o padre?… no lo entendía. Comentarios racistas por donde se los mire, comentarios hirientes para quien los recibe y defensivos para quien los hace.
Personalmente, no me gusta pensar que somos tan apáticos, de hecho, por naturaleza somos empáticos. Entonces me pregunto si quizás quien hace o piensa este tipo de comentarios lo vería de forma distinta si mira las cosas desde otro punto de vista. No es un punto de vista mágico ni espiritual donde todos somos parte del mundo, sino algo con más lógica si se quiere ver de esa manera, algo con otro sentido, comprender otras cosas que no habíamos visto.
Selección natural
Pensemos en la supervivencia y la reproducción, la selección natural. A través de miles de años la selección natural es la que nos ha movido. Para que la reproducción sea posible tenemos que sobrevivir el tiempo suficiente y esto implica la coordinación con otros individuos, formar grupos. De esta manera será más fácil encontrar comida, protegernos de distintas amenazas y buscar soluciones a los problemas que nos presente el medio en que vivimos.
La coordinación lleva un proceso de adaptación y el que no se adapte será apartado del grupo, por lo tanto tendrá muchas menos probabilidades de poder reproducirse. Es esencial la unión para determinados fines. Los grupos que mejor se coordinen aventajarán en recursos a los que no, entonces la cooperación y la competición se hacen presentes en el terreno de juego. Con las conductas pro-sociales surge la ayuda.
Conductas de ayuda
Existen dos principales conductas para favorecer la ayuda. Se comienza a dar la llamada selección por parentesco, esto no es más que promover esta conducta a nuestros parientes los cuales comparten nuestros genes y serán encargados de transmitirlos a futuras generaciones y también el altruismo reciproco, conducta que se basa en ayudar a otro individuo para que luego el favor sea devuelto de alguna manera.
Con estas dos conductas se labran las bases de las culturas colectivistas – individualistas. En las culturas colectivistas está mucho más marcada la ayuda entre familiares, vecinos y grupo en general, mientras que en la cultura individualista es más bien un feedback entre individuos sin importar si compartimos genes o no, lo que interesa es que para la meta individual de la persona es necesaria la ayuda de otro individuo y si luego ese individuo necesita ayuda se le será devuelta.
Entonces, la cooperación se dará o por la importancia de continuar con genes familiares o por las metas e intereses propios. Queda muy bien reflejado así las diferencias culturales que surgirán de una conducta o de otra. En culturas individualistas se verán potenciadas todas las herramientas de uso personal que se irán desarrollando con el tiempo mientras en las culturas colectivistas se desarrollarán herramientas de uso grupal. Esto no quiere decir que en las colectivistas no existan herramientas personales, sino que al conseguir recursos basados en estrategias distintas simplemente crecerán orientados a esa estrategia y tendrán distintos puntos fuertes y/o débiles comparados con la estrategia individualista.
Colectivistas vs Individualistas
En la cultura individualista se promueve la independencia y la autonomía, entonces los individuos que pertenezcan a este enorme grupo verán con buenos ojos y sentirán necesaria la valoración positiva de la autoestima. La autoestima es una de nuestras bases más importantes para ser individuos sanos mentalmente. Cuando se fomenta la autoestima, los pensamientos, las opiniones, las metas del individuo tienen valor sin importar lo que piense el grupo. El centro de atención es el individuo y no las relaciones. La comunicación es más directa y asertiva porque no se busca el agradar ni quedar bien sino expresar lo que se piensa.
En la cultura colectivista se defenderá al grupo y se pondrá por encima de los objetivos personales el fin del mismo, sin importar las consecuencias individuales. El grupo es más importante que el individuo aislado, es por ese motivo que las normas sociales adquieren un carácter principal en la conducta de los individuos. Será muy importante lo que los demás piensen de nosotros y el cumplir lo que se espera que seamos en la sociedad. Los lazos sanguíneos adquieren especial relevancia siendo estos la carta de presentación en muchas situaciones, como por ejemplo, ser la hija del alcalde ya te hace ser una persona importante y de buena familia, es decir, con buena reputación.
La ayuda de la globalización
Como se puede observar, los dos tipos de culturas tienen sus pro y sus contras. Sabemos que fomentar la potenciación del individuo es sano e importante pero también es importante el sentirse parte de algo, el no sentirse solo. La globalización ha ayudado a que las dos culturas se vayan mezclando y tomemos las cosas positivas de cada una para seguir creciendo y evolucionando según el medio vaya requiriendo, no olvidemos que hoy en día somos más conscientes de muchas cosas, pero no dejamos de ser una especie en continua evolución que tiene que resolver los problemas que el medio nos impone.
Aunemos puntos…
Ahora que hemos leído la explicación evolucionista de ciertas conductas, ¿no es más fácil entender por qué es tan importante para una mujer musulmana usar el hiyab? ¿no es más fácil entender por qué mi vecina “la noruega” no llama nunca a sus familiares y no los extraña?
Ahora podemos pensar algo diferente cuando aparece alguien que nos ve con 35 años, siendo mujer, y nos dice, ”¿Cuándo vas a tener familia? Se te va a pasar el arroz”. O si eres hombre y te cruzas con alguien que te dice, ”¿te quedas en casa a cuidar de tus hijos? ¡Te vas a volver loco!”, podemos mirarlo desde algo cultural y no sentirnos mal por la pregunta ni sentirnos culpables por no estar haciendo lo que se espera de nosotros.
Estamos en una evolución imparable, intentemos entender nuestros orígenes como especie para crear una nueva cultura que acompañe a los tiempos que corren. Unamos colectivistas con individualistas!
Adaptación al medio…como siempre!.
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